El puerto deportivo ha acogido este fin de semana por décimo año consecutivo la XVII edición del Rally Clásico Isla de Mallorca, un evento que lleva celebrándose en la marina y estrechando la unión entre los aficionados al mar y al motor. Y es que los aficionados de ambos sectores, náutica y motor, pueden disfrutar de esta simbiosis en el enclave único de uno de los puertos más destacados del Mediterráneo. Entre los numerosos equipos que se desplazan desde cualquier parte de Europa siempre hay vehículos que llaman poderosamente la atención y este año no ha sido la excepción.
Entre los participantes más destacados de estas joyas del motor se encuentran un coche eléctrico de la marca Loryc Electric Batteryrunner, una marca mallorquina creada en 1920 y que duró hasta 1923. Hace unos años, un ingeniero alemán recuperó la empresa con el objetivo de crear una movilidad más sostenible en la isla fabricando vehículos eléctricos en aluminio con más de 1.000 remaches, 20CV de potencia con los que supera los 100 km/h y tiene una autonomía de 200 kilómetros.
Los Jaguar modelo XKE y E-Type son otra de las joyas que han rugido durante la competición, junto a otros coches míticos de carreras como un Bentley Old Number One de 1948 y un Bentley ⅜ Racer de 1949.
FUENTE: N.P. RALLY CLÁSICO